Covid-19 en Filipinas: orden de matar a quienes «causen disturbios»
Redaccion
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«Matadles», dijo el presidente filipino Rodrigo Duterte el 1 de abril de 2020 en una orden televisada dirigida a las fuerzas del orden y a los militares, que tiene como objetivos a los «causantes de disturbios» y a quienes no respeten las medidas de confinamiento impuestas en el pa铆s para luchar contra la pandemia, seg煤n una informaci贸n de la secci贸n francesa de Amnist铆a Internacional (AI).
«En lugar de causar problemas os mandar茅 a la tumba», dijo Duterte refiri茅ndose a la oposici贸n y tambi茅n a todos los que «protesten y cuestionen las medidas gubernamentales».
Para los responsables de AI, «tirar a matar» es la marca de f谩brica de la presidencia de Duterte, y temen con raz贸n que ahora la pongan en pr谩ctica tanto las distintas polic铆as, como los militares, encargados de «mantener el orden» durante la cuarentena.
En el mismo comunicado, la organizaci贸n humanitaria se hace eco de las cifras facilitadas por la polic铆a filipina: en los 煤ltimos d铆as han detenido a cerca de diecisiete mil personas por no respetar el confinamiento o el alto el fuego en varias regiones del pa铆s.
AI denuncia el trato «inhumano» que est谩n recibiendo los detenidos, obligados a permanecer durante horas sentados bajo un sol de justicia, y encerr谩ndoles en jaulas para perros. «A otros les han condenado a penas de c谩rcel, pero dado el elevado riesgo de transmisi贸n del Covid-19 en los centros de detenci贸n, internarles en nombre de la salud p煤blica es contraproducente».
Duterte: un balance letal
Elegido presidente en abril de 2016 como candidato del partido PDP-Laban (de centro izquierda a izquierda), el abogado Rodrigo Duterte ya hab铆a anunciado sus intenciones cuando declar贸 en plena campa帽a electoral: "Olvidad los derechos humanos. Van a saltar chispas".
Se refer铆a a lo que constituye su primera obsesi贸n, luchar contra la droga de una forma muy peculiar, ya que en una conferencia de prensa poco d铆as despu茅s de acceder a la presidencia, exhort贸 a los filipinos a asesinar «tanto a los traficantes como a los toxic贸manos».
Antes ya hab铆a pedido al Nuevo Ej茅rcito Popular, brazo armado del Partido Comunista de Filipinas, que desarmara y detuviera a los barones de la droga.
El peri贸dico Philippine Daiy Inquiere public贸 el 7 de julio de 2016 una «kill list», una lista de nombres de v铆ctimas de ejecuciones extrajudiciales llevadas a cabo en los dos meses que Duterte llevaba en la presidencia, que despu茅s fue actualizada en febrero de 2017.
Al mismo tiempo, el senador Teddy Baguilat, del Partido Liberal, pidi贸 a la C谩mara de Representantes que investigara una serie de ejecuciones sumarias de presuntos traficantes de droga, petici贸n a la que se sum贸 la Alianza de Partidos de izquierda Bayan.
El 24 de febrero de 2017 fue detenida, acusada de relaciones con narcotraficantes, la abogada y senadora Leila de Lima, del Partido Liberal, principal opositora de Duterte, exministra de Justicia y directora de la Comisi贸n de Derechos Humanos durante la presidencia de Benigno Aquino (2010-2016). Amnist铆a Internacional denunci贸 entonces que la detenci贸n de la senadora –a la que considera «presa de opini贸n», lo mismo que el Parlamento Europeo- era una forma de silenciar a los cr铆ticos de un r茅gimen que se ha vuelto dictatorial.
Al d铆a de hoy, la senadora Leila de Lima contin煤a detenida. Desde la c谩rcel ha denunciado el fracaso de la pol铆tica contra la droga del Duterte y ha escrito en su cuenta de twitter que tiene un listado de los responsables de su detenci贸n y que «como Arya Stark», el personaje de Juego de Tronos, cada noche recita una letan铆a de los nombres con quienes un d铆a exigir谩 que se haga justicia.
«En lugar de causar problemas os mandar茅 a la tumba», dijo Duterte refiri茅ndose a la oposici贸n y tambi茅n a todos los que «protesten y cuestionen las medidas gubernamentales».
Para los responsables de AI, «tirar a matar» es la marca de f谩brica de la presidencia de Duterte, y temen con raz贸n que ahora la pongan en pr谩ctica tanto las distintas polic铆as, como los militares, encargados de «mantener el orden» durante la cuarentena.
En el mismo comunicado, la organizaci贸n humanitaria se hace eco de las cifras facilitadas por la polic铆a filipina: en los 煤ltimos d铆as han detenido a cerca de diecisiete mil personas por no respetar el confinamiento o el alto el fuego en varias regiones del pa铆s.
AI denuncia el trato «inhumano» que est谩n recibiendo los detenidos, obligados a permanecer durante horas sentados bajo un sol de justicia, y encerr谩ndoles en jaulas para perros. «A otros les han condenado a penas de c谩rcel, pero dado el elevado riesgo de transmisi贸n del Covid-19 en los centros de detenci贸n, internarles en nombre de la salud p煤blica es contraproducente».
Duterte: un balance letal
Elegido presidente en abril de 2016 como candidato del partido PDP-Laban (de centro izquierda a izquierda), el abogado Rodrigo Duterte ya hab铆a anunciado sus intenciones cuando declar贸 en plena campa帽a electoral: "Olvidad los derechos humanos. Van a saltar chispas".
Se refer铆a a lo que constituye su primera obsesi贸n, luchar contra la droga de una forma muy peculiar, ya que en una conferencia de prensa poco d铆as despu茅s de acceder a la presidencia, exhort贸 a los filipinos a asesinar «tanto a los traficantes como a los toxic贸manos».
Antes ya hab铆a pedido al Nuevo Ej茅rcito Popular, brazo armado del Partido Comunista de Filipinas, que desarmara y detuviera a los barones de la droga.
El peri贸dico Philippine Daiy Inquiere public贸 el 7 de julio de 2016 una «kill list», una lista de nombres de v铆ctimas de ejecuciones extrajudiciales llevadas a cabo en los dos meses que Duterte llevaba en la presidencia, que despu茅s fue actualizada en febrero de 2017.
Al mismo tiempo, el senador Teddy Baguilat, del Partido Liberal, pidi贸 a la C谩mara de Representantes que investigara una serie de ejecuciones sumarias de presuntos traficantes de droga, petici贸n a la que se sum贸 la Alianza de Partidos de izquierda Bayan.
El 24 de febrero de 2017 fue detenida, acusada de relaciones con narcotraficantes, la abogada y senadora Leila de Lima, del Partido Liberal, principal opositora de Duterte, exministra de Justicia y directora de la Comisi贸n de Derechos Humanos durante la presidencia de Benigno Aquino (2010-2016). Amnist铆a Internacional denunci贸 entonces que la detenci贸n de la senadora –a la que considera «presa de opini贸n», lo mismo que el Parlamento Europeo- era una forma de silenciar a los cr铆ticos de un r茅gimen que se ha vuelto dictatorial.
Al d铆a de hoy, la senadora Leila de Lima contin煤a detenida. Desde la c谩rcel ha denunciado el fracaso de la pol铆tica contra la droga del Duterte y ha escrito en su cuenta de twitter que tiene un listado de los responsables de su detenci贸n y que «como Arya Stark», el personaje de Juego de Tronos, cada noche recita una letan铆a de los nombres con quienes un d铆a exigir谩 que se haga justicia.
